La Galería Pelaires estará presente en la Feria ARCOlisboa, que tendrá lugar entre los días 25 y 28 de este mes de mayo. En su stand presentará trabajos de Ana Laura Aláez, Jorinde Voigt, Inês Zenha y Kathryn Macnaughton, todas artistas que han expuesto recientemente en Palma en el desarrollo del programa de la galería.
Esta es la sexta edición de ARCOlisboa, que contará con la participación de 85 galerías de 22 diferentes países en el Programa General y potenciará sus dos principales secciones comisariadas: África em Foco (comisariada por Paula Nascimento y que contará con la participación de galerías procedentes del continente africano) y Opening Lisboa (comisariado por Chus Martínez y Luiza Teixeira de Freitas), con la que se pretende investigar sobre los nuevos leguajes y espacios artísticos con el fin de traer a la feria nuevos contenidos e investigaciones.
Es la cuarta vez que la Galería Pelaires participa en ARCOlisboa, y lo hace presentando el trabajo de cuatro artistas a las que representa y cuyos trabajos han tenido un gran protagonismo en su programa más reciente. Un booth de 45m2 en el que Ana Laura Aláez presenta una obra reciente titulada Acaricia y golpea, una escultura colgante formada por 61 uñas de resina policromadas, colgadas de 61 hilos. Jorinde Voigt está presente con tres papeles de pequeño formato, hechos con tinta china, pan de oro, pastel, tizas al óleo y grafito, de la serie Pacientia-Studie, de 2020. Inês Zenha, premio especial en la edición especial, presenta una escultura instalativa hecha con cerámica esmaltada de 320 x 220 cm, que formó parte de la primera exposición institucional de la joven artista, que tuvo lugar en la Kunsthalle Lissabon a comienzos de este mismo año. Además, Zenha presenta 3 pinturas de gran formato y una serie de sus característicos dibujos hechos en pastel seco sobre papel terciopelo, todos de 2023. Finamente, Kathryn Macnaughton presentará una obra de 190 x 213 cm, un acrílico reciente que supone un giro en su nueva manera de interpretar el lenguaje pictórico.
Ana Laura Aláez (Bilbao, 1964) Aláez es reconocida por su enfoque multidisciplinario y su capacidad para abordar temas de género, identidad y espacio público en su obra. Estudió Bellas Artes en la Universidad del País Vasco y posteriormente continuó su formación en el Instituto de Artes Visuales de Nueva York.
Ana Laura Aláez abarca una amplia gama de medios, incluyendo instalaciones, esculturas, fotografía y vídeo. Sus obras a menudo exploran la relación entre el cuerpo, el espacio arquitectónico y el entorno social. En palabras de la propia artista, Acaricia y golpea (la obra que presenta en ARCO Lisboa) "es una lluvia de fragmentos, una tímida respuesta a esas sub-obras que aparecen en tangente dentro de las obras-origen. Detalles de una escultura que no se puede contemplar por todos los lados de un mismo golpe. Pone en presente el intento de retener algo que se escapa, como si distintas manos de mujer fueran pasándose entre ellas un modo de lectura con ese caudal de esquirlas a lo largo de la historia. Uñas o colmillos o melena fluctuante, como prótesis que ayudan a poner distancia con aquello para lo que aún no ha dado el suficiente tiempo para pasar a través delos propios órganos".
A lo largo de su carrera ha recibido numerosos premios y reconocimientos por su contribución al arte contemporáneo. Su trabajo ha sido exhibido en instituciones prestigiosas como el Museo Guggenheim Bilbao, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía en Madrid y la Bienal de Venecia, entre otros. Su trabajo se caracteriza por su enfoque conceptual y su capacidad para crear narrativas visuales que desafían las convenciones y cuestionan las normas establecidas. A través de su arte, invita al espectador a reflexionar sobre temas sociales y culturales, y a cuestionar las estructuras y roles preestablecidos en la sociedad.
Nacida en 1977 en Frankfurt, Alemania, Jorinde Voigt ha logrado reconocimiento internacional por su enfoque innovador y su capacidad para traducir conceptos abstractos en representaciones visuales impactantes. Estudió Filosofía y Literatura Alemana antes de embarcarse en su carrera artística. Su formación académica se refleja en su trabajo, ya que se inspira en conceptos filosóficos y en la relación entre el tiempo, el espacio y el pensamiento. A través de una combinación de dibujo, pintura, notación musical y gráficos crea composiciones complejas que exploran temas como el conocimiento, la percepción y la representación.
Una característica distintiva del trabajo de Voigt es su método de notación visual. A menudo desarrolla sistemas y estructuras gráficas para representar conceptos abstractos o procesos complejos. Sus obras se asemejan a partituras o diagramas científicos, y se sumergen en el mundo de los patrones y las estructuras subyacentes a nuestra realidad.
Inês Zenha (1995, Lisboa) vive y trabaja entre París y Lisboa. Ha iniciado recientemente su relación con Pelaires, y su obra pudo verse por primera vez en la galería en la exposición colectiva "Tales disorder", inaugurada en enero y comisariada por Cristina Anglada. Su práctica abarca desde la instalación y la pintura hasta la escultura y la cerámica, todo lo cual despliega como parte de su investigación y reflexión en curso sobre la representación queer formal y conceptual del cuerpo. Un cuerpo cargado de valores heteropatriarcales, un cuerpo que se esfuerza por liberarse y crear una nueva ontología para sí mismo. Algunos de sus últimos trabajos han estado explorando temas relacionados con la identidad, el deseo, la vulnerabilidad y las preguntas siempre cambiantes sobre el poder y el amor. Graduada en Bellas Artes en Central Saint Martins en Londres, actualmente vive en París después de un programa de residencia artística que completó en 2020.
Kathryn Macnaughton (Toronto, 1985) ha protagonizado recientemente una exposición -titulada Past Pleasures- en el espacio Pelaires Cabinet, la primera de la artista con la galería. Se formó y trabajó como diseñadora gráfica, utiliza este tipo de «compresión digital» en su favor. Al hablar de su obra, es inevitable utilizar un lenguaje típicamente postanalógico: enmascarado, superposición, bloques de color, siluetas. En este caso, estos conceptos se combinan con movimientos expresivos más románticos: un garabato baila sobre un busto, delineado en silueta, que guía la mirada del espectador alrededor de las curvas aplanadas del mismo modo que se guía el dedo por un mapa. La obra alberga simultáneamente una sensualidad acorde con los temas de género: como sugerencias de curvas femeninas que juegan a las sombras y se muestran como recipientes.
